Revista

La chispa republicana

Cambio climático

miércoles, 6 de diciembre de 2006

CAMBIO CLIMÁTICO

CAMBIO CLIMÁTICO, HACIA UN FUTURO INCIERTO.
Un trabajo de Laura Ojeda de la Revista Greenpeace
Septiembre-2006
El cambio climático ya es una realidad. Hoy, la temperatura de nuestro planeta es más caliente que la de hace 200 años. Es un hecho que el clima del planeta tierra está siendo alterado significativamente, como resultado del aumento de concentración de gases del efecto invernadero. Estos gases son consecuencia de la combustión de grandes cantidades de petróleo, gas y carbón para obtener energía. Aunque estos gases se producen de forma natural y son fundamentales para la vida en la tierra, ya que sin ellos nuestro mundo sería un lugar frío y yermo, el crecimiento de su emisión provoca unas temperaturas artificialmente elevadas y modifica el clima.
Los gases ya emitidos harán aumentar la temperatura de la tierra entre 1,3 y 1,4 grados centígrados (el llamado efecto invernadero) durante las próximas décadas. De hecho, desde comienzos del siglo pasado, la temperatura media de la superficie terrestre ha subido más de 0,6 grados. Se puede decir que es el mayor incremento de los últimos 10.000 años. De continuar con las actuales políticas energéticas, y el consiguiente aumento de emisiones de CO2, los científicos del Panel Intergubernamental de Cambio Climático (IPCC), un grupo de 2.500 expertos de primera línea, pronostican un calentamiento global del planeta de hasta 5,8º centígrados a lo largo de este siglo. Además, todos coinciden en que un cambio de influencia humana sobre el clima global ya se puede detectar entre las muchas variedades naturales del clima. Según David King, el asesor científico más acreditado del gobierno de Tony Blair: "El cambio climático es el problema más severo con el que nos encontramos hoy día, mucho más serio aún que la amenaza terrorista"
Como repuesta, se estima que los patronos de precipitación global y corrientes marinas también se alterarán. El aumento de temperatura tendrá efectos expansivos. Por ejemplo, los patronos de la lluvia y viento, que han prevalecido por cientos y miles de años cambiarán. El nivel del mar subirá y amenazará islas y áreas costeras bajas. En un mundo creciente superpoblado y alto estrés, con suficientes problemas de antemano, estas presiones causarán directamente mayor hambruna y más catástrofes.
Según la Organización Mundial de la Salud, aún un pequeño aumento de temperatura puede causar un aumento dramático de muertes; el esparcimiento de enfermedades tales como la malaria, dengue y cólera; sequías, falta de agua y alimentos. El IPCC lo plantea así: "El cambio climático con certeza conllevará una significativa perdida de vida. Y es que, pese a que los cambios en el clima se han presentado de forma natural a lo largo de toda la historia del planeta, nunca hasta ahora habían alcanzado un ritmo como el actual, precisamente porque no había sido consecuencia de la actividad humana. Estamos ante un problema muy complejo que, si no se aborda de inmediato, repercutirá negativamente en todas las formas de vida.
Los cambios del Cambio Climático

Los impactos del cambio climático ya son visibles: a lo largo del último siglo se ha confirmado que la temperatura global de nuestro planeta ha aumentado, al igual que se ha constatado un aumento de la frecuencia de ciertos fenómenos climatológicos extremos, el retroceso de los glaciales y la subida del nivel del mar.
Teniendo en cuenta unas previsiones de cambio climático moderado hay una serie de impactos que se sufrirán en un corto o medio plazo:
Como consecuencia de la elevación de la temperatura, subirá el nivel del mar a causa de la expansión térmica de los océanos y al deshielo de los glaciales.
Emisiones masivas de gases de efecto invernadero procedente del deshielo del permafrost y la destrucción de los bosques.
Elevado riesgo de fenómenos meteorológicos extremos como olas de calor, sequías e inundaciones. Se estima que en el ámbito global, la sequía se ha duplicado en los últimos 30 años.
En Europa, aumentarán las inundaciones fluviales en todo el continente, y en las costas, el riesgo de inundaciones y erosión aumentara sustancialmente.
Los ecosistemas, incluidos los glaciales, arrecifes de coral, manglares, ecosistemas árticos y alpinos, bosques boreales y tropicales, humedales, etc., se verán seriamente amenazados.
Se incrementará el riesgo de extinción de muchísimas especies y la pérdida de biodiversidad.
Entre los efectos a largo plazo:
Las corrientes atláticas se decelerará o se detendrá, con consecuencias dramáticas en Europa. También se interrumpirá el sistema de circulación de los océanos.
Las emisiones de metano, procedentes principalmente de los océanos, aumentará en la atmósfera y consecuentemente se sumará al calentamiento global de manera catastrófica.
El deshielo de Groenlandia y la Antártida, con la consecuente subida del nivel del mar durante varios siglos, podría cambiar el paisaje del litoral de los continentes. Subiría el nivel medio mundial del mar 7 metros, y en el oeste antártico de 5 a 7 metros. Se está comprobando que puede incrementarse esta aceleración con lo que habría un colapso dinámico del casquete polar.
El aumento de los gases de efecto invernadero en la atmósfera, principalmente de CO2, es responsable de estos cambios. Por ello tenemos la necesidad urgente de reducir drásticamente las emisiones de estos gases en las próximas décadas.
Cambio climático en España.
España es uno de los países más vulnerables al cambio climático por su situación geográfica. De continuar con el aumento progresivo de las temperaturas, muchas playas y localidades situadas en la costa un metro por debajo del nivel del mar, desaparecerán. España tiene ahora 23 días más de calor al año que hace 30 años y en el calendario, la llegada de la primavera se va a tener que adelantar dos semanas, así como se alargará el otoño 9 días más. Y lo más preocupante es que España es el país europeo donde el fenómeno se da con mayor intensidad. Además del aumento de las temperaturas, el cambio climático provocará en España una disminución de las precipitaciones y de la disponibilidad del agua, una reducción de la productividad de las aguas pesqueras, desajustes entre animales predadores y sus presas, pérdida de biodiversidad, aumento de catástrofes naturales e importantes afecciones sobre la salud humana.
El clima sufrirá cambios más que notorios, sobre todo en su temperatura, y se volverá más cálido. Se producirán cambios en las precipitaciones, con una clara tendencia a la baja. La situación será más acusada cuanto mayores sea los niveles de emisiones de gases de efecto invernadero. Junto al aumento de las temperaturas y el descenso de las precipitaciones en prácticamente toda la península, los impactos en la biodiversidad serán uno de los efectos más notables. Estos cambios se producirán a través de dos efectos antagónicos: el calentamiento y la reducción de las disponibilidades hídricas dando como resultado la "mediterraneización" del norte del norte peninsular.
Greenpeace apuesta por las energías renovables, junto con la eficiencia energética y el ahorro como las verdaderas soluciones contra el cambio climático. La sociedad actual utiliza la energía como si no existieran límites, ni riesgos, pero existen. Hay un límite que no podemos franquear y es la capacidad de la atmósfera para absorber CO2.
Por el bien de la Humanidad difunde este artículo y toma conciencia activa.
La Chispa Republicana.
15-10-2006